El detallismo del dramatismo
Siguiendo con la temática de la publicación anterior, en este caso os mostramos un espectacular conjunto religioso compuesto por la Virgen Dolorosa con Cristo yacente en su regazo, componiendo así la iconografía conocida como La Piedad. La espléndida talla de estilo barroco fue realizada a principios del siglo XIX de origen andaluz. Esta Virgen Dolorosa es una escultura de tronco sin tallar en madera, piernas esbozadas, y brazos articulados, todo en madera. El cuerpo de Cristo yacente está exquisitamente tallado en madera y policromado con absoluto realismo. La Virgen María, que acaba de recibir el cuerpo muerto de su Hijo, eleva el brazo derecho en señal de dolor. Es un ademán de angustia y soledad que contrasta con la serenidad del cuerpo inerte de su Hijo, al que sostiene apoyando la mano izquierda fuertemente sobre Cristo. Pero también es una actitud de petición de ayuda, de comprensión, de compasión, que busca del espectador que contemplaba esta escena mientras el paso procesion